Un doctor se identificó como “viudo” en una app de citas y poco tiempo después su esposa murió envenenada

En un caso que ha horrorizado a la comunidad, un antiguo residente médico de la Clínica Mayo se encuentra en el centro de una investigación por el supuesto envenenamiento fatal de su esposa, una farmacéutica, en agosto de 2023. Connor Bowman, de 31 años, enfrenta acusaciones graves que incluyen el asesinato premeditado de primer grado y el asesinato de segundo grado con intención, tras la trágica muerte de Betty Bowman.

Una serie de detalles escalofriantes han surgido tras la obtención de una orden de registro recientemente publicada, la cual apunta hacia la posibilidad de que Connor haya buscado en internet términos relacionados con “viudo” antes incluso de la muerte de su esposa. Lo sorprendente es el previo cambio de su perfil en una aplicación de citas en línea, donde se identificó como tal, lo que suscita interrogantes sobre su conducta y motivaciones antes y después del trágico evento.

La relación entre Connor y Betty, ambos profesionales vinculados a la prestigiosa Clínica Mayo, era aparentemente compleja. Según People, habían adoptado un matrimonio abierto que, eventualmente, habría empezado a desmoronarse, sumido en problemas de infidelidad y desafíos emocionales.

Un detalle aún más perturbador, informado por CBS News, fue la elección del veneno contra la mujer: la colchicina, un medicamento usado para tratar la gota, pero que en altas dosis puede resultar fatal, según la Oficina del Fiscal del Condado de Olmsted.

El misterio se profundiza al revelarse conversaciones y encuentros de Connor con varias mujeres a través de la aplicación de citas Bumble, poco después de la muerte de Betty. Estas interacciones muestran a un hombre que parecía avanzar rápidamente, presentándose como viudo y explorando nuevas relaciones, incluso cuando el luto por su esposa debería haber estado en primer plano.

Tales acciones han provocado indignación y han llevado a los investigadores a solicitar más información a Bumble sobre el acceso de Connor a la cuenta y los cambios en el perfil durante el período crítico en cuestión.

New York Post señaló que otro aspecto desconcertante del caso es la resistencia del acusado a que se realizara una autopsia a Betty, argumentando que su muerte fue natural y pidiendo su cremación, lo cual contrasta con el testimonio de amigos y conocidos sobre la situación real del matrimonio y el estado emocional de ambos.

El examen toxicológico finalmente desveló la presencia de colchicina en el sistema de Betty el día después de ser hospitalizada, lo que arroja una luz ominosa sobre la causa de su repentino empeoramiento y muerte por fallo orgánico. El obituario de Betty atribuye su muerte a una enfermedad autoinmune e infecciosa repentina, aunque las alegaciones de Connor sobre una posible hemofagocitosis linfohistiocitosis (HLH) como causa quedan en tela de juicio ante los hallazgos forenses.

Este caso, rodeado de tragedia, engaños y acusaciones graves, ha capturado la atención no solo por el perfil de los involucrados, ambos profesionales de la salud en una de las instituciones médicas más reputadas, sino también por los oscuros giros y revelaciones que siguen emergiendo.

A medida que Connor Bowman se prepara para volver a los tribunales el 11 de junio, muchas preguntas permanecen sin respuesta, dejando a la comunidad y a los observadores esperando justicia para Betty Bowman, recordada como “una luz para tantas personas”.