Apenas 18 días permaneció Carlos Navarro, El Yoyas, en ‘Gran Hermano’, el ‘reality’ por excelencia de Telecinco. Con 24 años y sin trabajo –se presentó como un pastelero en paro– entró en la casa de Guadalix de la Sierra (Comunidad de Madrid) para participar en la segunda edición del formato de telerrealidad presentado por Mercedes Milá. Allí conoció a Fayna Bethencourt, con quien mantuvo una relación y tiene dos hijos.
El Yoyas fue el primer participante de ‘Gran Hermano’ en su historia en ser expulsado por su comportamiento con la joven canaria y el resto de sus compañeros. Aquello no impidió que Carlos Navarro se prodigara, no sólo en Telecinco, en ‘Crónicas marcianas’, sino también en otras cadenas, como Antena 3 (‘La jaula’) y La sexta, donde colaboró con Jordi Évole en ‘Salvados’. Fue en 2017 cuando Fayna Bethencourt denunció a Carlos Navarro por violencia de género. El exconcursante de ‘Gran Hermano’ fue condenado a seis años de prisión por maltratar a su expareja y esta semana fue detenido por la Policía tras no cumplir con la orden de su ingreso en prisión hace dos años; una noticia celebrada por muchos, inclusive Mercedes Milá.
«’Gran Hermano’ me dejó muchas escenas grabadas para siempre. De las más delicadas no he hablado nunca por respeto a los protagonistas, pero lo de hoy es diferente», escribe la periodista en Instagram, donde, no sólo muestra su día a día, sino también habla de temas más ‘televisivos’, como ‘Supervivientes’.
«El amor de Carlos y Fayna fue una relación vivida minuto a minuto por los millones de espectadores que veían el programa con fruición y, por supuesto, por el equipo que lo hacíamos. Pero no tardaron en llegar los malos modos y las escenas violentas que obligaron a los responsables a expulsarlo de La Casa. Al salir cayó en mis manos, y recuerdo que le hice una entrevista sin piedad pero dejando espacio para el arrepentimiento. Él lo agradeció», recuerda Milá. La presentadora rememora que el exconcursante escribía poesía y se la llevaba a su librería con la intención de venderla.
Mercedes Milá admite que nunca supo del «infierno» que vivían Fayna y sus hijos: «Lo supe cuando lo juzgaron y lo condenaron. Carlos Navarro era un maltratador de libro y, a pesar de eso, Fayna Bethencourt tuvo que luchar a brazo partido para que la justicia la escuchara, admitiera sus pruebas y la protegiera de el padre de sus hijos. La historia es conocida: cumplía condena por fin y en un permiso penitenciario no volvió a prisión; se escapó».
La que fuera presentadora de ‘Gran Hermano’ elogia a Fayna por las lecciones que ha dado a todo el mundo y por su dignidad «asombrosa», y manda mucho amor tanto a ella como a sus hijos.
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