Los infiernos de la televisión de Candela en ‘Un nuevo amanecer’

Hace ya un tiempo que José Corbacho, allá por el 2017, visitó por primera vez un centro de tratamiento de adicciones por un motivo familiar y allí un trabajador del centro pensó que iba a ingresar. Todo quedó en una anécdota en un principio, pero lo cierto es que su cabeza hizo clic ese día y ahora, siete años después del primer chispazo de aquella neurona ve la luz ‘Un nuevo amanecer’ mañana en Atresplayer. «Me gusta jugar y en esta serie no he hecho otra cosa», afirma el director a ABC.«Me llamo Candela Nieto y soy actriz. Bueno, y una celebrity también. ¡Ah! Y también soy adicta. Sí. Cocaína. Me gusta. Por eso a veces se me va la cabeza. Igual debería ingresar en un centro de rehabilitación. No sé». Así se presenta Yolanda Ramos, que interpreta a Candela en una serie donde las risas están aseguradas. «La vida real tiene más de drama que de comedia, aunque a veces utilizamos la comedia para compensar los dramas personales de cada uno», afirma José Corbacho. Y es que la vida de Candela es pura comedia, pero también un drama. La reconocida actriz y figura televisiva está divorciada, arruinada y se droga en el camerino, el plató y en el coche de su representante. Sus momentos virales, su incapacidad de control y la ruina económica le lleva a internarse a un centro de desintoxicación. Ella hubiera preferido uno VIP para celebrities, pero no. La mala vida le lleva a un centro público en el que tendrá que luchar contra los prejuicios que tiene. Para Yolanda Ramos el humor es imprescindible, pero no en todos los ámbitos de la vida. «Odio que un político se haga el gracioso, ¿sabes? Es como si un médico jugara a hacer malabares mientras te pone la anestesia, ¿A que no te gusta? A mí tampoco», cuenta como puede mientras suelta una carajacada. Humor «subjetivo»En ‘Un nuevo amanecer’, la cosa no va de chistes en el guion o de un humor calculado. «Un actor muy conocido de este país me dijo cuando iba a hacer una serie: ‘Ten en cuenta que el humor son matemáticas’. Y me jodió la vida. Estuve para recuperarme diez años, que nosotros somos más de letras más que de ciencias», cuenta entre risas Corbacho. Yolanda Ramos reconoce que desde que apareció imitando en televisión a María Teresa Campos la gente le comenta que todos los papeles que ha hecho son sobre ella misma. «No soy yo, ¿vale? Es verdad que puede parecerlo, pero no es porque se parece a mí, sino porque me enfrento a todos los papeles igual, como soy yo», indica la protagonista. ¿Son buenos tiempos para el humor? «Sí, lo que pasa es que al final la sociedad evoluciona y tiene que evolucionar el humor. El humor es subjetivo, lo que hoy te hace gracia dentro de un tiempo igual ya no, y no pasa nada», explica Corbacho, que lo único que quiere, al igual que el resto de humoristas, es hacer reír al público, sin más pretensión.

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