Ahora, el caso que conmocionó y aún estremece a toda España ha vuelto a estar de rabiosa actualidad por la serie de Netflix que reproduce aquellos negros días de septiembre.
Dado el éxito de la ficción (aunque muy real en algunos aspectos), han sido muchos los testimonios que han salido a la palestra. Tanto de implicados en su día en el caso, el juez de instrucción Vázquez Taín o el propio padre de Asunta y también condenado, Alfonso Basterra; como de compañeras de cárcel de Rosario Porto.
Si hacía unos días se hacía viral en TikTok la entrevista a una de las reclusas que compartieron celda con la gallega en la que se aseguraba que Porto gozaba de grandes privilegios en prisión, ahora otra presa ha negado tal extremo.
Ha sido en ‘Y ahora Sonsoles’, donde una reclusa identificada como ‘María’, que fue un gran apoyo de Rosario en la cárcel -no en vano asegura que la madre de asunta la llamana «angelito»-, ha compartido algunos de los detalles del día a día en la prisión en la que se quitó la vida.
«Me acuerdo que tenía una foto en su cuarto del juez que la sentenció y ponía debajo ‘no dejes que la verdad te arruine una bonita historia’», cuenta.
Se refiere la exreclusa a Jorge Cid Carballo, el magistrado responsable de la sentencia de 18 años de cárcel con agravante de parentesto para Rosario Porto y Alfonso Basterra.
En cuanto a los supuestos privilegios, María describe una situación muy diferente para Porto en prisión:
«Empezó a trabajar en la biblioteca porque las otras internas de apoyo que tuvo le quitaban los cordones de los zapatos, le quitaban las cintas… No la dejaban vivir. Hasta para ducharse, que llamaban a los funcionarios y les decían que Rosario no se quería duchar y jolín, prácticamente la metían a la fuerza. Y dicen que tenía privilegios. Esa señora no tenía privilegios», detalla.
Su orelación con Alfonso Basterra
También ha revelado algunas de las opiniones que Rosario le dio sobre el que fue su marido durante 17 años, Alfonso, del que estaba separada en el momento del crimen:
«Me hablaba muy bien de él, maravillas de él. Que tenían una relación estupenda, que fue muy feliz con él», recuerda, aunque en el último año previo al asesinato de Asunta Rosario le había sido infiel, por lo que aparcaron su matrimonio.
«Por la ausencia de voluntad que produce la depresión, tu incondicional amiga te dará la lata más de lo necesario», detalla que le escribió Rosario a María en una carta, premonitoria de lo que acabaría pasando ese 18 de noviembre de 2020 cuando, tras dos intentos de suicido previos, Porto se quitó la vida.
En los últimos días diversos medios también se han hecho eco de la casa de Montouto en la que asesinaron a la pequeña, hoy en día okupada, y puesta a la venta por la única heredera de la madre de Asunta, en el que es uno de los casos más mediáticos de la historia de España.
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