«Antes muerta que sencilla» es el lema de Charo (59), una soltera de ‘First Dates’ que se describe como «coqueta, atractiva y liberal». A esta operaria de almacén de Xátiva (Valencia) le encantaría encontrar un Robert Redford del que enamorarse. Eso sí, se presentó en el programa de citas de Cuatro con las expectativas algo más bajas. Con un señor «bien vestido y arregladito», se conformaba. El problema es que Alfonso, ‘Koko’ (54), no era para nada su prototipo.
Charo lleva casi diez años sola. Pretendientes no le han faltado, pero considera que hoy en día los hombres solo quieren una noche loca. Y ella no está para eso. «No estoy chapada a la antigua, pero lo que veo hoy en día no me gusta», comentó ante las cámaras.
Koko, por su parte, sacó toda la artillería para conquistar a Charo. Y si llegaba a cuajar, entablar con ella una relación seria. Sin embargo, la valenciana no había visto en él lo que pretendía encontrar en su cita, de modo que todos los intentos que el soltero hizo por llamar su atención fueron en balde. Por más que se esforzó por hacerla reír, en este caso el humor no descongeló el corazón de la soltera. «El chico muy bien, pero no para pareja mía. Suerte para la mujer que te coja», volvió a dejar claro ella en los totales.
La insistencia de Koko para ligarse a Charo
Aunque si el soltero notó a Charo poco receptiva, se hizo el tonto. En un momento dado, la mujer le preguntó si le apetecía terminarse su plato «¿Que si me apeteces? Me has pillado», bromeó tirándole los trastos y aprovechando para recalcar que él, en el tema sexual, «de maravilla». «Me tomo dos Red Bull y me dan alas», aseguró.
Un momento de la cena protagonizada por Charo y Koko
Con cada insinuación de Koko, Charo lo mandaba a la ‘friendzone’ a ver si captaba el mensaje. Le costó, pero el mencionar la palabra amistad directamente fue clave para que asumiera que no obtendría un ‘sí’ en la decisión final. «No me cierro a nada, otra cosa es que me quieran conocer a mí. No he visto una entrega de ella hacia mi», admitió por fin el madrileño.
Con todo, cuando Charo le explicó que le había caído simpático y le había encantado la conversación pero que no lo veía como pareja por que no has sido «el ‘proctólogo’» que buscaba, no aceptó las calabazas tan ricamente. «Pues tú si eres mi prototipo, lo que pasa es que al no ver yo tanta entrega hacia mí, me desanimo. Posiblemente vas a perder la oportunidad de tu vida. Pero no pasa nada». «Eso eso lo que crees», zanjó ella también medio en serio medio en broma. Pese al rechazo de la soltera, le dio la enhorabuena por tener tanta autoestima y acabaron la cita deseándose lo mejor.
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