Últimas noticias

Crítica de ‘Back to black’ (**): Amy Winehouse perdida en su propia vida

Una vida corta, intensa, aprovechada y, al tiempo, completamente dilapidada. Amy Winehouse, un prodigio de voz, de estilo y de fuerza escénica solo hizo tres álbumes y ya el tercero era póstumo. Esta película lleva el título de su disco más conocido y vendido y quiere ser un dibujo biográfico, un ‘biopic’, de la cantante londinense. Y lo consigue, pero solo en parte, pues se queda algo flotante en la superficie de esta artista sin duda abisal. La directora, Sam Taylor-Johnson, recorre sin mucho tino algunos de los momentos clave en la vida de Winehouse, pero apenas ofrece un relato melodramático de su vida sentimental y algunas esquirlas de su talento y sus logros.

La película puntúa su relación con sus padres, especialmente con el padre, Mitchell, taxista y cantante ‘casero‘ que le contagió su amor por Sinatra, Tony Bennett y el soul y el jazz; y se centra casi por completo y con obsesión en su amor (también obsesivo) por Blake Fielder, con quien mantuvo uno de esos idilios que ronchan, que se mastican mal y de cuya digestión siempre hay noticias luego, y no buenas. Está muy descrito en imágenes su primer encuentro, en la barra de un bar, y los dos actores, Marisa Abela y Jack O’Connell, coreografían estupendamente la imparable atracción entre ellos, con chispa, con gracia, con ese vaticinio de peligro que tuvieron el uno para el otro.

No están, en cambio, bien tramados ni sus ascensos ni sus caídas, y de su infantilona vida en común hay que extraer ambas cosas, que tenía tiempo para componer sus inusuales letras y músicas y que el alcohol y las drogas se colaron en sus rutinas diarias sin apenas negrura y sordidez, y hay algunas actuaciones, no excesivamente memorables, pero que dejan, al menos, la impresión de que Marisa Abela posee la mayor fortaleza de esta película. Su interpretación es sobresaliente, y sabe recoger la pose, el gesto, el desafío, el drama, el dolor y también su potencia escénica.

La impresión que deja la película ‘Back to Black’ es rara, pues más parece que se asiste a un retrato de la depresión pueril, de los amores indigestos y pelmazos, que al estampado trágico de una de las figuras más importantes de la canción de este siglo. Tal vez le falte algo de aquello que decía Ransom Stoddard (James Stewart) respecto a los hechos y la leyenda: hay que imprimir la leyenda. Y eso es lo que conseguía el cineasta Asif Pakadia en el documental ‘Ami (La chica detrás del nombre)’, que se presentó allá por 2015.

Content Source: www.abc.es

Latest Posts

noticias populares